PASTOR PICARDES * Con un aspecto particular debido a una capa de pelo hirsuto y duro, el Pastor Picardés es un óptimo cuidador de ovejas además de perro de guardería. Dotado de un buen carácter, logra integrarse perfectamente, incluso en la familia, donde se convierte en un amigo fiel e incansable sobre todo de los niños con los cuales juega gustoso, demostrando cualidades de delicadeza y afecto verdaderamente excepcionales motivos de su gran difusión como perro de compañía en las regiones septentrionales de Francia. * Son testimonio de su antiguo origen, cuadros y grabados de la época medieval. Su historia está caracterizada, sin embargo, por momentos de gran expansión y también de crisis profundas. Los primeros Picardeses fueron presentados en exposición en 1863 conjuntamente con los Beaucerons y los Pastores de Brie. En las dos guerras mundiales, se halla la causa de la desaparición casi total de esta raza cuyo estándar oficial es reconocido en 1925. A comienzos de los cincuenta, un grupo de aficionados y entusiastas, empieza a criarlo sobre la base de una estricta selección, obteniendo, en menos de treinta años, un desarrollo realmente inesperado hasta el punto de que en la actualidad es considerado, por muchos en Francia, como uno de los mejores perros pastores de este país. * Perro de tamaño mediano, de gran dureza, elegante en las formas, el Pastor Picardés se distingue sobre todo, por su aspecto particular al pelaje. Dotado de una expresión vivaz y atenta, tiene un carácter muy equilibrado que lo lleva a realizar su trabajo con absoluta destreza y dedicación. Bastante liviano -no supera los 22 - 23 kg.- tiene gran resistencia y agilidad. El pelo duro y áspero al tacto, con abundante subpelo fino y claro, lo defiende perfectamente de cualquier inclemencia dándole al mismo tiempo, un aspecto similar al grifón. Los colores más extendidos son el gris con reflejos que van del negro al azul, el gris-rojo, el leonado claro y oscuro, en tonalidad uniforme o mezclados entre sí. * * Alzada a la cruz. Machos de 60 a 65 cm., hembras de 55 a 60 cm. Cabeza. Caja craneal moderadamente ancha. Pelo sobre las cejas largo, pero no lo suficiente como para cubrir los ojos. Frente ligeramente abovedada. Hocico fuerte, no demasiado largo ni terminando en punta. Trufa negra. Caña nasal recta. Bigote y barba, no muy abundante. Escotadura naso-frontal muy leve, equidistante de la protuberancia de la cabeza. Labios enjutos y bien cerrados. Mandíbulas potentes. Ojos. De tamaño mediano, no salientes, de color más o menos oscuro, según el color de la capa. Orejas. De nacimiento bastante alto, el perro las lleva naturalmente erguidas, de tamaño mediano, anchas en la base y con la punta ligeramente redondeada. Cuello. Fuerte y musculoso, bastante largo. Extremidades anteriores. Con aplomo correcto. Hombros musculosos, largos y oblicuos. Osamenta enjuta. Ligamentos evidentes. Metacarpos ligeramente inclinados de atrás hacia adelante. Cuerpo. Tórax profundo que desciende hasta el codo. Longitud del cuerpo un poco mayor que la alzada a la cruz. Costillas bien arqueadas en el tercio superior aplanándose gradualmente hasta el esternón. Dorso recto, región lumbar sólida. Vientre poco retraído. Extremidades posteriores. Muslos largos y musculosos. Corvejones de angulación media. Metatarsos robustos, enjutos perpendiculares al suelo. Pies. Redondeados y cortos, arqueados y bien cerrados. Uñas oscuras, fuertes y cortas. Plantas fuertes, bastante elástica. Pueden presentarse espolones. Cola. Larga hasta la punta del corvejón, con una leve curva en el extremo. Pelaje. Duro, con una longitud de 5 a 6 cm., sobre todo, el cuerpo y de 4 cm., en la cabeza. Subpelo fino cerrado. Color gris, gris-negro, gris con reflejos negros, gris-azul, gris-rojo, leonado. * ALIMENTACION. Las necesidades diarias son de 1.550 -1.650 kcal. diarias para el ejemplar adulto, como ración de mantenimiento. Para aquellos ejemplares utilizados para guardar las ovejas, las necesidades indicadas, se elevan bastante. CUIDADOS DIARIOS. A pesar de estar considerado como un perro de gran dureza, con una buena resistencia física tanto a la fatiga como a los elementos atmosféricos, debe realizarse un periódico control de su piel donde, por las características del pelaje, pueden cobijarse ectoparásitos. El uso frecuente de un cepillo para pelo duro es, sin lugar a dudas, no solo aconsejable sino incluso indispensable. CON EL VETERINARIO. Como en muchos otros perros de pastor, la operación para eliminar los espolones en los cachorros, inmediatamente después del nacimiento, es considerada importante. En efecto, los espolones en los perros destinados a una vida no precisamente cómoda, en condiciones ambientales que no siempre son favorables, pueden constituir un elemento donde se enganchen, ramas, tocones, zarzas, etc.